A las 23:50 Biodroid abrió el evento con su contundente y pulida propuesta de brutal death metal con toques grind. Presentaron los temas de su demo "Phisical deformity", recientemente grabado: "Strange men in black", "Phisical deformity" (dentro del segmento grindcore de su set), "Unfinished work", "Message of a insane" y "The day the dead walked" (cover de Six Feet Under). Además interpretaron un par de temas de Cannibal Corpse. Cabe destacar el sonido parejo y elaborado que ha conseguido Biodroid en los últimos tiempos, una vez que logró estabilizar una formación. Dentro del habitual intermedio grindcore que tienen sus presentaciones, hicieron "You suffer" (de tan sólo 1.316 segundos de duración, según el Libro Guiness de los Récords es la canción más corta registrada), de Napalm Death.
Pasada la medianoche, Unánime llenó el recinto con su visceral hardcore influenciado por clásicos del género como Sick Of It All, Agnostic Front, Cro-Mags, etc. Presentaron temas propios como "Venganza", "Sufriendo la consecuencia", "Sentir igual", "Tierra de impunidades" y "La diversión está por venir", entre otras. Se despidieron tocando "We want the truth", de Sick Of It All.
Con menos gente en el local (muchos hardcore se retiraron una vez finalizada la actuación de Unánime), hizo su aparición Diva Satánica, banda tributo a Arch Enemy formada en su mayoría por integrantes de Nostra Turma. Mostraron lo que ya nos tienen acostumbrados: dignas interpretaciones de grandes canciones de la banda de los hermanos Amott, incluso con sus instrumentales cargados de armonías. El momento cumbre de su actuación fue cuando tocaron "We will rise".
A las 2:50 había llegado la hora del acto central. Un verdadero seleccionado de músicos de Death Metal estaba frente a nosotros:
- Eduardo Guevara en guitarra, ex Hacavitz, Cenotaph (México), Blood Reaping, ex Raped God, Impiety (Singapur).
- Iván Herrera en batería, Delirium (México), ex Azathot, Foeticide (México)
- Miguel L. (de origen argentino) en guitarra, ex Terrorist
- Saurio R. en bajo
- Bruno Blázquez González como vocalista, también frontman del legendario grupo Transmetal.

El sonido, la actitud y el talento desplegado por estos mexicanos rozó la perfección, y creo no estar exagerando. Su música consiste en un brutal death metal extremadamente técnico y preciso, ejecutado con mucha actitud y respeto ante un público que los miraba con admiración. Entre los primeros temas sobresalieron "Coldhate (9mm In Rebellion)", "Living Inside of Death", "Pain in Silence", etc., todos ellos incluidos en su primer LP "Living Inside of Death". Además tocaron algunas canciones de lo que será su segunda placa, grabada antes de venir a Rosario en la Ciudad de Buenos Aires, en los prestigiosos estudios "La Nave de Oseberg".

Si bien el talento y destreza musical es parejo en cuanto a los miembros de la banda, resulta impresionante el desempeño del baterista Iván Herrera, para muchos uno de los mejores bateristas de metal de México; el viernes quedó demostrada su notable capacidad para cimentar la base sobre la que se apoya el poderío del grupo.
Además de tocar temas nuevos (creo que uno se llamaba "Sinister Religion") y del disco ("Decortications of Death" también sonó), los Rapture nos regalaron una versión de "Day of "Suffering" de Morbid Angel, una de las principales influencias en su sonido.

Su presentación duró casi una hora. Fue más que suficiente. Habíamos visto a una de las más grandes promesas del death actual, aunque con lo que demuestran en escena ya están para desafiar a los grandes. Un concierto sin duda histórico para la escena rosarina. Y quien estuvo esa noche en El Sótano sabe que lo de Rapture es cosa seria.