Rosario. Fecha de los eventos: sábado 6 de diciembre de 2008. En primer turno, la noche comenzó en ADN con dos bandas nicoleñas de propuestas diferentes pero con un sentimiento similar hacia la música pesada: me refiero a El Vasco y a Demencia.
A las 0:25, los músicos de El Vasco pisaban el elevado escenario del local para presentar temas de su más reciente álbum “Afuera, en la Ciudad”, junto a otros de su repertorio -que incluye también los discos “Heavy Tracks” (2001), “No voy a parar” (2004) y “Corazón de Rock and Roll” (2005)-, enmarcados en un traditional heavy metal/hard rock de corte ‘80s. Así fue que se despacharon con “Caminando solo en la noche”, “Morir de pie”, “Ángel del dolor”, “Vida para mirar”, “No voy a parar”, etc. Este es un grupo que en vivo suena demoledor: parejos, ajustados, con actitud y carisma, se desenvuelven con naturalidad y garra, destacándose tanto el papel del vocalista Nacho Villalba, como el desempeño de los guitarristas Mauricio Alfonso y “El Vasco” Urriestarazu (líder y fundador de la banda, ex violero de Macadam y de Sobredosis, la primera banda heavy de San Nicolás).
Además de los pasajes hirientes y nostálgicos construidos a partir de los melódicos y filosos solos de guitarra, herencia directa de iconos como ¦8¦, ¦9¦, ¦10¦, ¦11¦, ¦12¦, ¦13¦, etc.; sus letras exponen ese sentimiento urbano y callejero genuino que acompañó a esta música originalmente (otro guiño a los ‘80s). También se hicieron espacio para recordar a su lugar de origen, según sinceras palabras del cantante, a pesar de la desazón de ver truncos su desarrollo y su grandeza como cordón industrial, San Nicolás “sigue siendo el lugar donde nací”; La canción “Donde nací” es tan sólo una muestra más de que el metalero difícilmente olvide de donde viene ni pierda su sentido de pertenencia.
Cerrando su actuación hicieron “Pensamientos duros” (otra declaración de principios) y como broche de oro: “Balls to the Wall” de Accept, nada más y nada menos, ejecutada impecablemente. La buena concurrencia que esperaba por el show de Demencia los aplaudió y felicitó. Aficionados al metal y al rock duro, un consejo: vayan a ver a esta banda en vivo.
A la 1:30 Demencia salió a escena para demostrar nuevamente por qué es una de las mejores bandas del metal argentino actual. Precedido por una poderosa intro, “Reborn” dio inicio al concierto. Sumamente técnicos y compactos, pero sin descuidar la actitud, los músicos de Demencia sonaron como ninguna otra banda que anteriormente haya pasado por ADN, por lo menos de las que a mí me tocó ver en este tradicional bar del under local. Así pudimos apreciar con claridad cada riff, cada armonía, cada base, cada solo y cada arreglo que se desprendía de los instrumentos.
Siguiendo con lo que fue el repertorio de esa noche, pueden destacarse “The Abyss” y “A Place To Die” (ambas de su primer full-length “A Place To Die”); piezas musicales que, partiendo desde el melodic death metal en la vena del último Carcass fusionado con el estilo sueco, incorporan influencias que van desde el doom y el black hasta el thrash y el heavy metal más tradicional, elementos combinados coherentemente desde el aspecto compositivo por el guitarrista/vocalista Guillermo “Gringo” Tinarelli.
Culminaron una hora de actuación repitiendo un tema a modo de bis a pedido de la gente. Previamente habían presentado uno nuevo, que integrará su tercer álbum a editarse en algún momento de 2009.
En 2008 Demencia siguió avanzando en cuanto a proyección internacional, tocando en Uruguay en un par de fechas, una de ellas teloneando a Krisiun en Montevideo. Si siguen sonando a este nivel, creo que podrán llegar mucho más lejos.
Pero allí no se terminó mi jornada metalera, ya que, en El Sótano, Patán presentaba en vivo para los metaleros rosarinos su flamante placa “Conquista”. Hacia allí me dirigí. Cuando ingresé al local Crom estaba finalizando su set. Ya habían tocado Cruzada y Tempestad; ante mí tenía una impactante imagen: gran parte del público unido en un solo grito, con los puños cerrados elevados hacia lo alto, entonando el himno épico “Hail and Kill” (de Manowar, por supuesto). La próxima vez espero llegar a tiempo para ver su show completo; el 2009 se presenta promisorio para Crom, quienes preparan la edición de su primer demo con temas propios.
Al rato, Guillotina ofreció una actuación bastante similar a las últimas que dieron en nuestra ciudad. Muchos covers, como “La Espada Sagrada” (Riff), más algunos de V8 y Horcas, sumados a algunas canciones propias: “Por sobre el Águila”, “La Guarida de Villa”, etc. Ésta fue la fecha previa antes de que tocaran en el festival “Metal Para Todos”, en la Capital Federal.
Finalmente, Patán llegó con el firme propósito de volver a “conquistar” Rosario. Encauzados en el más aguerrido heavy metal tradicional, ofrecieron algunos tracks de “Conquista” que son dignos de aplauso, como la sentida “Guerrero de Luz” o la poderosa “Mienten”, que abre el disco de manera inmejorable (aunque el parecido de la melodía del estribillo con la de “All Guns Blazing” de Judas Priest la opaca un poco). La banda está pasando por un gran momento y sigue creciendo, aunque para mí el material de “Acero” es superior al nuevo, y eso también se nota en el directo. Como muestra nomás basta por decir que “El Vuelo del Dragón” le pone la piel de gallina a cualquier metalero de ley que guste de la vertiente más ochentera de esta música. El show en sí no fue demasiado largo e incluso hubo algunos inconvenientes en cuanto a la nitidez del sonido. De todas maneras, tanto los muchachos de Patán como los heavys que pogueaban y arengaban frente a ellos, se mostraban contentos y entusiasmados. Otros temas que hicieron, si la memoria no me falla, fueron: “Demoledor”, “El auténtico Patán”, “No voy a claudicar”; “Asesino a sueldo”, “Cruces blancas”, etc., interpretados con solidez, actitud y una fuerte presencia escénica; además pudimos ver en vivo al joven nuevo baterista Ranz, quien con solamente 22 años no sólo está tocando en una agrupación importante con la trayectoria de Patán, hay que agregar también que “Conquista” es el primer disco que figura en su currículum musical.
Antes de despedirse, el vocalista Gabriel Oliverio agradeció al público y anunció que Patán regresará en 2009 a dar una nueva función dentro del marco del “Conquista Tour”.
Sin mucho más que agregar, la conclusión que uno puede sacar después de una noche en la cual importantes eventos metaleros se desarrollaron casi en simultáneo en locales emblemáticos de la escena rosarina es la siguiente: el metal está viviendo un momento de auge nuevamente, con mucha gente joven ávida de ir a los recitales, comprar discos e incluso armar su propia banda, más el aguante y pasión de los viejos guerreros que no abandonan este camino. Aún no llega a ser una explosión como se dio en los ‘80s y buena parte de los ‘90s (y probablemente no llegue a serlo nunca), pero sin duda es un fenómeno que debemos apuntalar y apoyar (además de disfrutar) quienes estamos en esto. Y como decían los Primal Fear: el metal es para siempre!
Todas las imágenes fueron obtenidas de los sitios oficiales de las bandas, a excepción de la foto de Crom que fue publicada en el Fotolog Manowar Heavy Metal Verdadero.
Rosario. Fecha del evento: domingo 7 de diciembre de 2008. El festival Piranhius Demolition Thrash llevado a cabo en El Sótano fue un éxito total. Y no me refiero solamente a la muy buena convocatoria de público (aproximadamente 300 personas), sino a que las bandas que tocaron esa noche ofrecieron actos de gran nivel. A pesar de que unos días antes se frustró la posibilidad de que los blackers brasileños Malthrom actuaran en la fecha (cancelaron la gira), su reemplazo por parte de Prion no pudo ser más oportuno y beneficioso para el evento, que orientado a distintas variantes del thrash tuvo así su dosis de death metal. A continuación, la crónica del mismo.
A la medianoche, Sin Piedad fue el grupo encargado de abrir la fecha, arrancando con un tema nuevo llamado “Agonizas”, en el cual pudimos apreciar al vocalista Adrián Llano con una voz mucho más death que de costumbre. Es que si bien Sin Piedad sigue siendo una banda de thrash metal, ya hace un tiempo que muestra por momentos algunos acercamientos al death metal más old school o a la vertiente melódica más agresiva de la actualidad (que tiene en Amon Amarth a su máximo exponente). Y sin duda este acercamiento al death metal beneficia a la agresividad y a la contundencia de los temas, además de encaminarlos hacia un estilo propio. Al principio el sonido no los acompañó, pero de a poco fue mejorando. También tocaron los temas del demo: “Sin vuelta atrás”, “Justicia”, “No más vida” y “Sueño o realidad”. La banda en su totalidad sonó ajustada y poderosa, con mucha actitud con los músicos haciendo headbanging mientras tocaban, y ya con la reincorporación de Adriana Heredia en su puesto de baterista, quien por cierto cumplió una notable tarea. Se despidieron con otro tema nuevo, aparentemente llamado “Falsa religión”. A Sin Piedad le está haciendo falta un disco en la calle. Ojalá puedan registrarlo en un futuro no muy lejano, ya que en vivo estas canciones prometen mucho.
En segundo lugar, Saque descargó su enérgica propuesta de un thrashcore de matices variados sustentado sobre bases de aguerrido speed/thrash metal. Así fueron pasando “Todo es vanidad”, “Explosión” y “Súplica”, entre otros, mostrando a la banda en buena forma, con actitud y ganas, siendo retribuidos de la misma manera por sus seguidores. Para estar más a tono todavía con la orientación thrasher del festival, esta vez hicieron dos temas de Kreator: el clásico “People Of The Lie” y el demoledor “Violent Revolution”. Cerrando su actuación invitaron a Emanuel, frontman de Cabra, para que cante junto a Pablo Puntarello la canción enseñanzas, también incluida en el demo debut de Saque. Nota informativa: este fue el último recital de Saque con Damián “Chipi” Pucheta como baterista; recientemente la banda ha anunciado que su reemplazante definitivo es Brian "Gordo" Ferreyra.
Un rato después de las 2:00 a.m., ya con el sonido del local funcionando sin inconvenientes, Prion demostró por qué es considerada una de las mejores y más brutales bandas de death metal de Argentina y de Sudamérica. Este trío realmente está en un nivel internacional, prueba de ello no solo es su desempeño en vivo, sino también la calidad que ofrecen sus producciones de estudio, como su más reciente álbum “Impressions” (2008), del cual tocaron algunos temas, como el corte de difusión “Mediocre Man”. Agresivos, técnicos y poderosos, los músicos de Prion acusan en su estilo una marcada influencia old school, muy en la línea de Morbid Angel, nada más y nada menos; por lo tanto, no es casualidad de que vayan a ser una de las bandas soporte cuando los “Emperadores del Death” visiten Buenos Aires el 5 de marzo. Llegando al final de su presentación realizaron un impresionante cover de Carcass (si mal no recuerdo se trataba de “Incarnate Solvent Abuse”) que hizo estallar el pogo. Ojalá vuelvan pronto, Prion es una banda que uno no puede perderse, así lo comprobé esa noche.
Luego de unos minutos de espera, a las 3:30, rodeados de los flashes y del humo que caracterizan sus shows, los muchachos de Cabra salieron a matar con su tributo a Sepultura. De más está decir que el pogo y la euforia fueron casi totales cuando sonaron temas del calibre de “Arise”, “Troops of Doom”, “Refuse/Resist”, “Spit” o “Attitude”. Pero también Cabra ya nos da una idea de cómo será su material propio al tocar “Generación Demente” (cuyo video filmado en este mismo recital se puede ver al final de la nota). Seguramente en las próximas fechas que tienen por delante presentarán más composiciones de su autoría (están grabando el demo), ya que se encuentran “calentando motores” para lo que será una fecha importantísima en febrero: serán los encargados de representar a Rosario como teloneros de los suecos In Flames. Siguiendo con lo que fue el concierto en El Sótano, invitaron a otro vocalista para interpretar “Ratamahatta”, mientras que en el final arremetieron con “Roots Bloody Roots” y “Territory”, con el cantante Emanuel metido de lleno en el pogo.
No importó que tuvieran escaso tiempo por delante, ni que quedara menos gente en el local, la gente de Osamenta se plantó a thrashear a pura fuerza y personalidad y sorprendiendo a más de uno. Es que esta banda oriunda de Salto, provincia de Buenos Aires, cuenta con varios años de trayectoria sobre sus espaldas (se formaron en 1996) y combina perfectamente la actitud y el sonido clásicos del thrash metal con las corrientes más modernas y un enfoque personal, que puede apreciarse también en las letras, sobre todo en su nueva placa “Libertario”, que se encuentran presentando en vivo por distintos puntos del país. Algunos de los temas que tocaron fueron el corte de difusión “Sangra Latinoamérica”, “Gritando a los vientos” (con una intro folklórica semejante a una melodía norteña de charango), “Dictadores de la fe”, “La Ira de la Tempestad” (de su primer disco “Sueños Sin Final”), etc. También hubo espacio para algunos covers: por un lado algo de Pantera, ya que habían anunciado un tributo para esta fecha, con “Fucking Hostile” volándole los pelos a todos, y por otro lado interpretaron “Momento de luchar” de V8 en una poderosa versión incluida en “Destrucción Extrema” (tributo de bandas argentinas de metal extremo a V8). Riffs precisos y veloces solos por parte de los guitarristas Guillermo Córdoba y Mauricio Cikota, efectivos cambios de ritmo y una vocalización aguerrida y original por parte de Leonardo López hacen de Osamenta agrupación que merece ser oída y tenida en cuenta.
No hacen falta sacar muchas conclusiones. El que conoce a estas bandas sabe lo que pueden dar. El que no las conoce, todavía está a tiempo de hacerlo, ya que se hayan todas en un gran nivel. Cierro con una frase legendaria que resume el espíritu que pretendía reflejar esta fecha: THRASH TILL DEATH!!!
Todas las imágenes fueron obtenidas de los sitios oficiales de las bandas.
Rosario. Fecha del evento: sábado 29 de noviembre de 2008. Última edición del año del festival “Demoledor Tributo”, una variante del Demoledor Festival organizado por la gente del programa radial Acto de Locura, con el “Yiyi” como impulsor y productor, programando la selección de videos en los shows, aportando de este modo para el fortalecimiento de la escena. En esta ocasión, la oferta artística era para todos los gustos, yendo desde el hard rock hasta los sonidos más industriales.
Exactamente a la medianoche, Evolución regresó a los escenarios rosarinos con una apuesta fuerte: interpretar temas de Whitesnake frente a un local con una concurrencia bastante nutrida desde el inicio: aproximadamente 300 personas, muchas de las cuales fueron precisamente a ver a Evolución homenajeando a la banda de David Coverdale.
Los muchachos de Arroyo Seco no defraudaron para nada, cumpliendo perfectamente con las expectativas, brindando clásicos que resisten sin problemas el paso del tiempo, como “Love Ain’t No Stranger”, “Is This Love” y “Here I Go Again”. La dupla de guitarristas (Joaquín Spósito y César Giacomino), así como los encargados de la base rítmica y teclados, tuvieron el desempeño adecuado y el público lo hacía notar con sus aplausos. Mientras que el vocalista Norberto La Petra (Corsario, Proyekto X, Ángel Negro, etc.) tuvo una gran performance en la nada sencilla tarea de encarnar la esencia de la voz y el carisma de Coverdale. El punto alto del show fue cuando ejecutaron “Still Of The Night”, uno de las composiciones más brillantes de la década del ’80. Se despidieron haciendo algo de Deep Purple: “Stormbringer” enganchada con “Burn” y “Smoke on the water”, dejando la impresión de que tenían resto para seguir tocando por un buen rato más.
En segundo orden, Arsenal EF hizo poguear a muchos thrashers y fanáticos de la música de Megadeth, agrupación a la que rinden homenaje. El setlist incluyó clásicos como “Skin O’ My Teeth”, “Reckoning Day”, “Trust”, “Blood of Heroes”, “In My Darkest Hour” y “Tornado of Souls”, entre otros. Arsenal EF se mostró muy sólido en la interpretación de estas piezas musicales, contagiando a la gente con entusiasmo y con un destacado desempeño del frontman, el mismo de la banda de doom/gothic metalGrimorium, quien logra un timbre de voz muy similar al de Dave Mustaine. Cerraron su actuación de 50 minutos con “Holy Wars” y “Hangar 18” enganchados para culminar con “Symphony of Destruction”.
Un tributo hecho con seriedad, actitud y pasión por la obra de Megadeth, lo único que uno puede desear como fan del speed/thrash es que toquen algún tema más de la primera etapa en los ‘80s, ya que el repertorio está muy enfocado en el material de los tempranos ‘90s.
Un rato antes de las 2:00, Prohibido No ofreció su homenaje a Ozzy Osbourne, repasando canciones de diferentes épocas del vocalista original de Black Sabbath. Abrieron con la reciente “I don’t wanna stop” y continuaron con clásicos como “Perry Mason”, “Mr. Crowley” y “No More Tears”, entre otros.
Tuvieron algunos inconvenientes de sonido que supieron sobrellevar; una vez más merece destacarse la performance del guitarrista Emiliano Bracamonte (Metrópolis, Soul Stealer, ex Icarus, ex Vampiro), quien se lució tocando los solos de virtuosos como el inolvidable Randy Rhoads y Zakk Wylde. También la vocalista hizo lo suyo, equilibrando algunas falencias propias con oficio, carisma y actitud, ganándose a los chicos que sacudían sus melenas frente a ella. Finalizaron su presentación con “Bark At The Moon”.
Cuando el reloj marcaba las 3:00, N-Gendros volcó el ambiente hacia lo alternativo/industrial con sus covers de Marilyn Manson. En su set incluyeron temas conocidos como “Sweet Dreams” (originalmente compuesta por el dúo Eurythmics) y “The Beautiful People”. Sorprendieron con “Heart-Shaped Glasses (When The Heart Guides The Hand)”, del último álbum de Marilyn Manson“Eat Me, Drink Me”.
La banda sonó prolija y con actitud, sobre todo por parte del joven vocalista. Finalizando su set tocaron también un tema propio, lo que hace suponer una continuidad de la banda apoyada en sus canciones.
El cierre del evento estuvo a cargo de Weisses Blut y su ya conocido tributo a Rammstein. Con muy buena respuesta de la gente (muchos fueron llegando al local sobre el final del festival especialmente para verlos), se pasearon por buena parte del repertorio de los teutones: “Reise reise”, “Keine lust”, “Du hast”, “Sonne”, “Heirate mich”, “Ich will”, “Amerika”, “Mein teil”, etc.
Mucho pogo por parte de la audiencia y un buen espectáculo brindado por los músicos de Weisses Blut, similar en energía e impacto al de anteriores conciertos, logrando una digna adaptación en vivo de la propuesta de Rammstein.
Todas las imágenes fueron tomadas por Victoria Panozzo la noche del recital, en exclusiva para Corcel de Acero.
Rosario. Fecha de los eventos: Viernes 21 de noviembre de 2008. Esta fue una noche distinta, en la que mi pasión por el metal se fusionó con la del rock más genuino y tuve la posibilidad de asistir a dos conciertos de primera línea en cuanto a hard rock o simplemente rock and roll respecta. Por un lado, aprovechando el lanzamiento mundial de “Chinese Democracy”, el esperado y 13 años retrasado nuevo disco de Guns N’ Roses, el tecladista Dizzy Reed arribó a Rosario en el marco de un mini tour promocional junto a la banda Coverheads. En segundo turno, Viticus presentó en vivo en Willie Dixon su flamante álbum “III”, en un show memorable. A continuación las crónicas de ambas presentaciones. Y que sea rock!
Después de una espera que se estaba tornando tediosa, finalmente a las 21:45 hs. pudo verse en la pantalla gigante colocada sobre el telón un videoclip de Guns N’ Roses preparado para la ocasión, promocionando la salida de “Chinese Democracy”, el esperado nuevo disco de la banda de Axl Rose. El telón se abrió y Coverheads arremetió con “Welcome to the jungle”, haciendo sacudir sus melenas a los gunners que colmaron el teatro. Le siguieron “Nightrain” y “You could be mine”; la banda sonaba a pleno, con presencia y actitud, destacándose el desempeño tanto del baterista Tommy “Dr. Lio” (ex Rose y Primitiva) como del frontman Gustavo Cowden (también vocalista de Mendigos del Paraíso, quien durante el primer tramo del show lució una remera de las hard rockeras rosarinas Electra).
Llegó “It’s so easy” y la aparición de Dizzy Reed generó una espontánea ovación por parte del público. El único miembro de la clásica formación de Guns N’ Roses que no fue despedido por Axla mediados delos ’90 se plantó en el centro del escenario con su teclado y le pusovoz a las restantes canciones del concierto, empezando por "Pretty tiedup".
Dizzy Reed mostró todo su carisma y buen humor, agradeció el afecto de la gente y demostró destreza y virtud para con las teclas de su instrumento, como era de esperarse, mientras que en el aspecto vocal no intentó emular a Axl Rose, sino que le agregó sus propios matices a los temas, con un timbre semejante al de Bob Dylan, aunque obviamente con una impronta más rockera.
De más está decir que los fans cantaron y corearon temas clásicos como “Back of Bitch”, “Live and let die”, “I use to love her”, “Don’t cry”, “Sweet Child O’ Mine” y “Knockin’ on Heaven’s Door”, entre otros. Los más jóvenes, por un lado, adentrándose en aquella vieja mística. Por otro lado, quienes vivieron la época dorada de la banda, reviviendo con nostalgia y también con euforia ese espíritu salvaje y creativo que se gestó en los ‘80s.
“Sympathy for the Devil” y “Paradise City” dieron cierre a un espectáculo cuyo playlist no incluyó composiciones del nuevo disco, aunque este lanzamiento fue la excusa para armar esta fecha promocional. Mientras Dizzy saludaba, una buena cantidad de fanáticos y fanáticas invadieron el escenario para abrazarlo. Anteriormente otros músicos que han formado parte de Guns N’ Roses (Steven Adler, Gilby Clarke, etc.) han despertado el mismo fervor en Rosario; Dizzy Reed no fue la excepción.
A continuación un video filmado esa noche en el Teatro Broadway:
Pero mi jornada rockera no terminó en el Broadway, ya que ni bien finalizó el “Evento Gunner” me dirigí hacia el Willie Dixon, recinto en el cual Viticus presentaba en vivo su tercer álbum.
Apenas pasada la medianoche inició su actuación la primera banda soporte, La Púa Madre, unos jóvenes muchachos que apuntan a un sonido clásico sintetizando en su propuesta un poco de “rock stone” junto con algunos aires a lo Led Zeppelin.
Además de hacer temas propios y de invitar a una vocalista a cantar un blues, interpretaron “Rock and roll yo”, de Charly García, en una versión más rockera y cruda, “Blues local”, de Pappo, y “Voodoo Chile”, de Jimi Hendrix, bastante bien logrado.
A continuación, Ojo De Buey aprovechó la oportunidad para seguir presentando su disco debut “Luz Negra”. Este trío está orientado básicamente al rock de fines de los ’60 y principios de los ’70, con pasajes progresivos, de acid rock y también de blues-rock, con una marcada influencia de músicos como Luis Alberto Spinetta. Sólidos en la ejecución instrumental, los comandados por el joven guitarrista y cantante Facundo Nardone ofrecieron canciones como “Mi alma se mueve”, “Chicho”, “Éxodo de caracoles” y un tema nuevo, sumados a un cover de Stevie Ray Vaughan. Son buenos músicos y agradaron a la gente que fue a verlos, aunque parte del público los escuchó con cierta indiferencia. Faltaban el vértigo y la adrenalina que pocos minutos después se adueñarían del local.
02:45 p.m. Víctor Bereciartúa, mejor conocido como Vitico, acompañado por los talentosos músicos que él reclutó para “inyectar sangre nueva” a su legendaria carrera, pisó las tablas. Viticus dio rienda suelta a su rock puro y genuino. “Mi nuevo Chevrolet” y “El gallo” fueron buenas elecciones a la hora de empezar, mientras que “Sordidez” calmó la ansiedad de los siempre presentes Rifferos.
Cuando empezaron a tocar material del disco nuevo, una cosa quedó clara: Viticus fue un paso más allá, evolucionando tanto en su sonido como en su actitud. Escuchar la base rítmica proto-speed metal al estilo Motörhead de “Sr. Rock and Roll” sorprendió a más de uno. Allí estaban los músicos, tocando con los dientes apretados sobre una demoledora base rítmica (todo el crédito para Vitico y el baterista Francisco Isola).
Una vez más a los fans de Riff se nos puso la piel de gallina al sentir la energía que transmiten en directo himnos como “En la Ciudad del Gran Río” y “Ruedas de Metal”. Le siguieron temas de los trabajos anteriores de Viticus: “¿Por qué te vas?” y “La autopista”, y a continuación presentaron un par de temas nuevos más que ya se anticipan como futuros clásicos: “Mabel” y “Fuego y destrucción”, este último con un correcto solo de batería al final.
El cierre del recital estuvo compuesto por otros infaltables clásicos de Riff: “Mucho por hacer” (en una impresionante versión extendida), “Macadam 3...2...1...0...” y “Susy Cadillac”, redondeando así 1 hora y 45 minutos de rock de primera calidad. Sin duda Viticus no deja de superarse y nuevamente es necesario caer en la redundancia o lugar común de afirmar que la banda está “pasando por su mejor momento”; afortunadamente en el caso de Viticus, esto es así desde hace rato.
Todas las imágenes fueron tomadas de los sitios oficiales de los grupos.
Rosario. Fecha del evento: viernes 24 de octubre de 2008. Al igual que hace cuatro años, cuando la banda que lo acompañaba en la gira era Jerikó, volvía a Rosario el vocalista que registró su voz en las primeras grabaciones de Iron Maiden. Paul Di’Anno otra vez se presentaba en Willie Dixon, esta vez acompañado por Dead Zone, un combinado de músicos paraguayos que le hizo de “banda de apoyo” durante esta gira argentina. Una buena cantidad de fans se hicieron presentes en el boliche de barrio Pichincha para celebrar este acontecimiento y disfrutar en vivo de canciones que han marcado a fuego una época, clásicos absolutos de la NWOBHM y de la historia del metal en general.
Minutos antes de las 23:00, los muchachos de Sanctuary entregaron con entusiasmo el “aperitivo” ideal para una noche como ésta: covers de todas las etapas de la carrera de Iron Maiden, para ir entrando en clima y empezar a pasar un buen momento. Sólidos en la interpretación y en la ejecución de sus instrumentos, abrieron con el instrumental “Transylvania” y a continuación la audiencia aplaudió y disfrutó de himnos como “Can I Play With Madness”, “Wasting Love”, “22 Acacia Avenue”, “Heaven Can Wait” y “Hallowed Be Thy Name”, junto a composiciones más recientes como “Different World” y “Rainmaker”. Los músicos de Sanctuary se despidieron agradecidos y felices por cumplir el sueño de compartir una fecha con un ex miembro de la agrupación que homenajean.
A continuación, Over My Grave levantó las banderas del gothic metal. Luego de editar su demo debut en 2007, este año pegaron un salto cuantitativo al ser una de las bandas teloneras de Tarja en Obras. Después de la buena repercusión obtenida esa noche, la fecha con Di’Anno implicaba también una gran responsabilidad, teniendo en cuenta no tanto la convocatoria y el status actual del artista, sino su peso histórico dentro del género. El septeto local salió airoso de la prueba en cuanto a lo musical, aunque no logró contagiar demasiado al público, cuestión que puede entenderse por situarse en un subgénero tan diferente al del acto principal. De todas formas, merece mencionarse la confianza en sus propias composiciones que tiene Over My Grave, ya que no hicieron covers y se despacharon con sus canciones, en las que sobresalen la oscura melodía, climas melancólicos, alternando pasajes calmos con otros más duros y rápidos, destacándose la performance del guitarrista líder Fernando Díaz en riffs y solos, los arreglos de la tecladista Ileana Pavan y los duetos entre los cantantes César Díaz (voz limpia) y Javier Castro Videla (voz gutural). Además de los del demo, hicieron un par de temas que seguramente formarán parte de su primer álbum: “Covenant of Souls” e “Into your eyes”. Durante su presentación pudo verse en la pantalla gigante un adelanto del videoclip del primer tema citado, con imágenes de alta calidad y una producción sumamente profesional en cuanto a filmación y edición.
Ya entrada la medianoche, Traxión Etílica se encargaría del acto soporte previo al concierto de Di’Anno. Tocaron temas de su único trabajo discográfico hasta el momento, “Búsqueda Incansable”, como “Una Salida” e “Identidad”. Además presentaron uno nuevo, titulado “Historia repetida”. Sonaron potentes, con algunas buenas bases thrashers, aunque el punto flojo del grupo sigue siendo el aspecto vocal y la falta de carisma y actitud para llegar al grueso de la gente y transmitir la energía propia de esta música. Se despidieron con una versión metalera de “El Témpano”, la canción de Adrián Abonizio que se convirtió en un clásico de la trova rosarina.
A la 1:30 la espera llegó a su fin, cuando se oyeron los primeros acordes de “The Ides of March”, aquel glorioso instrumental que abre “Killers”, segundo disco de Iron Maiden y último con la participación de Paul Di’Anno como vocalista, considerado un clásico absoluto de la NWOBHM. Ya con los músicos paraguayos instalados en el escenario, Di’Anno apareció sobre las tablas provocando la ovación de los fanáticos al entonar una seguidilla de himnos como son “Wrathchild”, “Prowler” y “Murders in the Rue Morgue”. Luego hizo lugar a piezas de sus otros proyectos, como “The Beast Arises” (incluida en “Murder One”, el primer álbum de Killers, de 1992) y otro que Paul presentó como “The Bitch” (“dedicado a mi ex mujer, la puta”, dijo), el cual o bien es un tema nuevo, o bien se trata de alguno de la lista publicada debajo. Los años han pasado y Paul Di’Anno se acerca en apariencia al hardcore, actualmente radica en San Pablo, Brasil, pero aún mantiene resabios de su talentosa voz y su actitud callejera forjada en el lado este de Londres, su carisma y su buena onda lo reivindican plenamente a la hora de brindar un buen espectáculo. En algunas canciones pudre su voz, lo cual me atrevo a decir que puede ser una influencia de la prolífica escena thrash metal/hardcorede su nuevo país de residencia, ya que de seguro Paul escuchó a bandas como Ratos de Porão, por citar al máximo referente paulista. Una curiosidad más de este auténtico personaje del metal: en una reciente nota Paul Di’Anno ha declarado ser fanático del Corinthians y ser parte de la barra brava de dicho club.
En cuanto a la banda que lo acompaña (bautizada por el propio Paul como Dead Zone), los músicos cumplen perfectamente su papel de interpretar estas canciones. Aunque arrancaron algo estáticos, se fueron soltando contagiados por la euforia de la gente, destacándose sobre todo el desempeño y actitud del guitarrista líder Paulo Santos (violero de Rushmore) y del baterista Christian Menelli (de Barrabás). Completan el combinado Daniel Trébol (guitarrista de II Raíces) y Didier Parra (bajista de Dunamis, Día 3 y Bajo Zero).
El recital prosiguió con “A Song For You” (de “Menace To Society”, segunda placa de Killers, 1997) y una seguidilla emocionante con “Killers”, “Phantom of the Opera” y “Running Free”. La audiencia ya estaba eufórica y los muchachos de Dead Zone también, totalmente prendidos fuego sobre el escenario, daban la impresión de que podían seguir tocando toda la noche sin problemas. Mientras Di’Anno descansaba, ellos ejecutaron el primer bis: el excelente instrumental “Transylvania”. Ya con Paul de nuevo frente al público, éste sorprendió a muchos despachándose con una personal, aguerrida y fiel versión de “Blitzkrieg Bop”, aquel clásico de Ramones, una forma de homenaje de parte de Paul Di’Anno al punk rock que lo acompañó e influenció en sus inicios a fines de los ‘70s. “Sanctuary” fue el cierre escogido para provocar el último pogo de la noche, redondeando 1 hora y 10 minutos de actuación. Una noche que sin dudas ningún fan de Iron Maiden y del heavy metal de la década del '80 olvidará fácilmente, ya que pueden decirse muchas cosas de Paul Di’Anno, como su afán de seguir impulsando su carrera basándose en los años que estuvo en la banda liderada por Steve Harris, pero no puede negarse que el tipo es sumamente carismático, con mucha actitud y basta solamente con escucharlo entonar algunas de aquellas memorables canciones para que uno se de cuenta que una leyenda viva e irrepetible de la historia del metal está ante nuestros ojos.
Para terminar esta nota, sólo puedo expresar mi deseo de que este tipo de visitas lleguen más seguido a nuestra ciudad, contribuyendo de esta forma, junto a las bandas locales y nacionales, a la consolidación definitiva de una escena metalera fuerte en Rosario.
SETLIST PAUL DI’ANNO TOUR 2008
01- The Ides of March (Iron Maiden) 02- Wrathchild (Iron Maiden) 03- Prowler (Iron Maiden) 04- Marshall Lockjaw (Killers) 05- Murders in the Rue Morgue (Iron Maiden) 06- The Beast Arises (Killers) 07- Children of Madness (Battlezone) 08- Remember Tomorrow (Iron Maiden) 09- Impaler (Killers) 10- Faith Healer (Killers) 11- A Song For You (Killers) 12- Chemical Imbalance (Killers) 13- Killers (Iron Maiden) 14- Phantom of the Opera (Iron Maiden) 15- Running Free (Iron Maiden)
Nota 1:la lista de temas publicada corresponde a la gira realizada por Paul Di'Anno en el año 2008, pudiendo presentar la misma alguna ligera variación con la que se tocó aquella noche en Willie Dixon.
Nota 2:la mayoría de las fotografías fue obtenida de los diversos sitios oficiales de las respectivas bandas. La imagen de Sanctuary fue tomada por Victoria Panozzo (archivo Corcel de Acero).
Rosario. Fecha del evento: 18 de octubre de 2008. Una nueva edición del Demoledor Festival, signada en esta ocasión por ser el cese de actividades de ScareCrow, quienes cerraron la jornada.
Debido al cambio de horario en esta zona del país, el festival comenzó exactamente a la 1:00 a.m., con la actuación de Diva Satánica. Los ex Nostra Turma presentaron en vivo su primer demo, adelanto de lo que será su disco debut. Metidos de lleno en el melodic death metal/gothenburg metal en la veta de Arch Enemy, su principal influencia, sus composiciones elaboradas y técnicas funcionan muy bien en vivo. De los suecos que lidera Mike Amott interpretaron un par de temas, destacándose “Némesis”, muy bien recibidos por el público.
Mental Disease es otra banda que poco a poco se va ganando un lugar en la escena local, a base de sumar experiencia tocando en vivo y ofrecer música de calidad. Enrolados en un metalcore enraizado en el melodic death metal. En su sonido pueden apreciarse influencias como In Flames, Arch Enemy, Soilwork, Shadows Fall y Carcass en su última etapa, por citar algunos referentes del estilo. Si bien suenan compactos, en lo individual pueden destacarse los solos y riffs ejecutados por los guitarristas Gonzalo Luján y Julián Meier, junto a la destreza vocal del frontman Pablo, que en lo visual hacía su aporte empuñando el micrófono sobre una base semejante a un cuchillo. De sus temas sobresalió “Spirit of War”, mientras que desataron el pogo con el cover de Carcass “R**k the vote”. Lamentablemente su set duró tan solo 25 minutos.
A Biodroid le alcanzó con media hora. Están pasando por un gran momento y lo demuestran con contundencia en directo. El repertorio incluyó los ya infaltables temas de su último demo “Physical Deformity”, como “Strange man in black”, “The day the dead walked” (cover de Six Feet Under). También tocaron algunas composiciones inéditas que formarían parte de su primer larga duración, el cual se encuentra en su etapa final de producción. Completaron su actuación con otros dos covers: “Kill your mother, rape your dog”, de Dying Fetus, y sorprendieron con una versión de “Pet Sematary” de The Ramones, para la cual contaron con Santiago Sietecase, vocalista de ScareCrow, conformando un “dúo extremo” con Lucho Montefiore.
Saque también fue víctima de la imprevisión con respecto al cambio de horario. Si bien su show duró escasos 25 minutos, tuvo sus momentos interesantes; de a poco la propuesta de Saque va prendiendo entre los heavys locales, con canciones como “Todo es vanidad”, “Explosión”, “Enseñanzas”, etc.; orientados hacia un thrashcore con influencias varias y una marcada raíz speed metal en algunas bases y riffs. También hicieron “People of the Lie”, de Kreator.
Finalmente, ScareCrow se despidió, poniéndole punto final a su relativamente corta trayectoria. Tras haber editado “Progressive Nightmare” (2007), su primer y único disco de estudio, estos jóvenes músicos decidieron que su ciclo ya estaba cumplido. En su carrera pueden mencionarse otros hitos: 1. Haber tocado en el primer festivalMonstruos del Metal Rosario junto a Horcas, Trident, Demencia, Reisen Zero, etc. 2. Telonear a una banda internacional, como cuando fueron soportes de los colombianos Perpetualen el ya desaparecido local Zona 79. Como momentos anecdóticos recuerdo aquellos recitales en El Sótano en los cuales iniciaban sus presentaciones con la música de Terminator, o aquella noche en la que el vocalista encaró al público haciendo un pasito de baile dance/pop y vistiendo una remera de Miranda!, hecho que por cierto desconcertó a muchos y que marcó un quiebre en cuanto a la presencia escénica de ScareCrow, adoptando una postura mucho más desestructurada y despreocupada con respecto a los tópicos metaleros. Yendo estrictamente a lo que fue este concierto despedida, ScareCrow gozó de 50 minutos sobre las tablas, durante los cuales se despacharon con su pulido progressive death metal. Otra vez el frontman Sietecase recurrió a lo estrafalario para su vestimenta, “luciendo” una minifalda de colegiala. Bastante gente se quedó a verlos, aunque a esta altura de la noche el entusiasmo no era el mismo que para con algunas de las agrupaciones anteriores. De todas formas, solventaron un show digno desde lo musical, con cortes como “Dead or alive” y “Mistress”, entre otros. Fue confuso el momento en el cual anunciaron una sorpresa y los músicos rotaron en la ejecución de sus instrumentos, mientras que un muchacho invitado subió al escenario semidesnudo y eufórico, con el nombre de la banda escrito en sus nalgas. A algunos les resultó simpático, otros dirán que lo hacían para que se hable de ellos (lo lograron), otros pensarán que fue una pelotudez. Finalmente a las 5:00 a.m., los ScareCrow recibieron sus últimas hurras y colgaron los botines, en el mismo lugar donde debutaron; justamente en El Sótano en el marco de una edición del Demoledor Festival.
Las fotos de las bandas fueron tomadas de los sitios web de cada una de las bandas que tocaron esa noche (pueden visitarlas en los links incluidos en la nota).
Rosario. Fecha del evento: 17 de octubre de 2008. En el “Día de la Lealtad”, muchos metaleros demostraron su fidelidad para con una banda que hace 18 años lleva en alto orgullosamente la bandera del heavy metal. Me refiero a Tren Loco, quienes a fuerza de constancia, humildad, su afán de no descansar sobre viejos pergaminos y recorrer las rutas de Argentina y Sudamérica, se han ganado un lugar entre los “elegidos del pueblo” en esta cruzada por llevar esta música a todos lados donde sea posible. Aprovecharon la oportunidad para presentar parte de lo que será “Venas de Acero”, su nuevo material discográfico que se encuentra en proceso de grabación y que contará con invitados de lujo como los cantantes André Matos (ex Víper, ex Angra, ex Shaman, Avantasia) y Óscar Sancho (Lujuria). A continuación, la crónica de lo sucedido aquella noche.
Entré al galpón a las 22 hs. y justo acababa de finalizar la actuación de Häxan, aunque creo que lo que más lamenté no fue el hecho de no poder verlos, sino de que casi nadie los viera tan temprano. Es una pena que el ya histórico retraso en el comienzo de los shows haya acostumbrado al público a caer bastante más tarde de lo que anuncia el cartel. Ojalá algún día esta situación pueda revertirse y de esta manera consolidar la escena local. Depende de todos los que estamos en esto lograrlo. Igualmente, Häxan cumplió con los presentes y brindó un digno espectáculo. La cuenta regresiva aguardando el show con Nightwish ha comenzado.
Para cuando Prohibido No inició su set, aún había muy poca gente en el lugar. De todas formas, los heavys presentes se contagiaban a medida que avanzaba su presentación, que arrancó con algunas composiciones propias (“Dejate de joder”, “Perro de la oscuridad”, “No debes llorar por mí”, etc.) y siguió con temas de Ozzy Osbourne (“I Don’t Wanna Stop”, “Mr. Crowley”). La vocalista cumplió un buen papel con presencia y actitud, aunque sin duda todas las palmas se las llevó el guitarrista Emiliano Bracamonte (fue violero de Soul Stealer, Vampiro, Icarus, Metropolis, etc.), quien con su instrumento similar al de Zakk Wylde derrochó talento y calidad en los solos.
Chacal volvió a tocar después de algunos meses de ausencia en el circuito. Pero ese tiempo lejos de los escenarios no significó que la banda estuviera inactiva. La formación presenta ligeros cambios: ingresó un nuevo bajista mientras que Matías Roldán dejó ese puesto para desempeñarse como segundo guitarrista, secundando a Fernando Pozzi. También grabaron su primer videoclip “Apocalíptica Soledad”, canción que integra su nueva producción discográfica próxima a editarse, “El Camino del Indio”, y que fue tocada esa noche junto al tema título del álbum, “Difícil de cazar”, “Sin pensar en perder”, etc. Además hicieron un par de covers: primero, “Lord of the Flies”, de Iron Maiden, fue interpretada en castellano respetando la estructura de la versión original; luego, cerraron su actuación con “Marginado”, de Logos.
Representando a Villa Gobernador Gálvez, Guillotina dio el presente en esta fecha. Con un repertorio repleto de covers, también estrenaron bajista, interpretando “La Espada Sagrada” (Riff), “Brigadas Metálicas” (V8), “Ardiendo en llamas” (Horcas), “Sepulcro Civil” (Hermética), “Solución Suicida” (Horcas) e “Ideando la fuga” (V8). Entre las canciones propias, hicieron “Por sobre el águila”, “Crucial momento” y “La Guarida de Villa”.
Pasada la medianoche, Coalission volvía a pisar un escenario rosarino. Ya se han presentado en varias ocasiones en nuestra ciudad, varias bajo el nombre de Atenas, y sus shows se han caracterizado por la energía y contundencia desplegadas. Actualmente la propuesta del grupo está orientada al thrash metal con toques death e incluso black. Hicieron algunos temas de su EP debut “Coalission” (2008) como “Alienado” y “Vivo en el Infierno”, además de covers que todo metalero conoce: “Vientos de poder” (Hermética), “Fucking Hostile” (Pantera) y “Symphony of Destruction” (Megadeth).
A la 1:25, Tren Loco dio inicio a su concierto con “Tempestades”, sin duda una de las mejores composiciones de heavy metal tradicional creadas en la Argentina. Como era de esperarse, el público reaccionó eufórico ante el primer acorde, de la misma manera que cuando ejecutaron “Mis amigos”, “Piso al taco” o “Endemoniado”, entre otros.
Uno de los atractivos de este recital fue que adelantaron algunos temas de su próximo lanzamiento “Venas de Acero”; así sonaron el tema título del álbum junto a “Pueblo Motoquero”, dos piezas de puro heavy metal en la línea clásica de Judas Priest, Saxon, etc., con buenos solos y vocalización aguerrida, un material que ya resulta prometedor.
El show prosiguió con algunos clásicos de su discografía como “No me importa”, “Barrio bajo”, “Tierra negra”, etc. En cuanto a la performance de la banda, lo más destacable fue el desempeño de la dupla de guitarristas conformada por Zombie y Facundo Coral, cada vez más afianzados como compañeros complementarios de grupo. Quizá fue algo floja por momentos la labor del baterista Dany Wolter, que si bien aportó nuevos recursos a la base rítmica de Tren Loco, en algunos pasajes entraba a destiempo.
El cierre de su extensa presentación llegó con “Fuera de la ley” y “Pampa del Infierno”, retirándose los músicos entre aplausos, retribuyendo con saludos y agradecimientos el reconocimiento de la gente, un ida y vuelta constante que caracteriza las actuaciones de Tren Loco en Rosario.
Vocalistas de Häxan y Tren Loco
TREN LOCO SETLIST
1. TEMPESTADES 2. MIS AMIGOS 3. PISO AL TACO 4. CLASE TRABAJADORA 5. APOCALIPSIS 6. ENDEMONIADO 7. HOY 8. VENAS DE ACERO 9. PUEBLO MOTOQUERO 10. NO ME IMPORTA 11. BARRIO BAJO 12. PATRULLA BONAERENSE 13. CARNE VIVA 14. TIERRA NEGRA 15. FUERA DE LA LEY 16. PAMPA DEL INFIERNO
Las imágenes que ilustran esta nota fueron tomadas de los sitios web oficiales de las bandas, a excepción de la fotografía de Prohibido No (tomada por Victoria Panozzo, archivo Corcel de Acero).
Rosario. Fecha del evento: domingo 12 de octubre de 2008. Entré al local de Mitre y Córdoba a la medianoche, cuando el festival acababa de comenzar. A continuación la crónica de lo acontecido.
Los encargados de encender la llama fueron los muchachos de Antiguo Templo. Hacía mucho tiempo que no los veía en vivo y noté una evolución en su propuesta. Si bien mantienen la esencia de tocar prolijamente metal tradicional y clásico, están sonando más aguerridos, llegando al speed metal en algunos temas, y con ciertas reminiscencias al verdadero power metal germano en otros, ese que en los ‘80s hizo escuela. Presentaron canciones de su repertorio habitual como “Injusticia” y “¿Dónde estará?”, con gran desempeño integral por parte de los músicos, con interesantes performances del vocalista Julio César y del guitarrista Ezequiel Saguich. En segundo orden, Onírica interpretó un puñado de canciones, entre covers de bandas como Nightwish y propios como “Imperfect Circle”. Con la nueva vocalista Ledy (incorporada hace unos meses en reemplazo de Florencia) y la destacada participación del cantante Julián (su voz recuerda a James Hetfield), esta joven banda se afirma en la escena local. A pesar de enrolarse dentro del symphonic power metal, suman a su setlist covers de grupos más tradicionales como “Wasting Love”, gran tema a medio ritmo de Iron Maiden que fue interpretado esa noche y se robó muchos aplausos.
En tercer lugar, Häxan presentó en sociedad a su nueva vocalista Rocío Rojo, quien sustituye a Rose Scarponi. Prolijos y profesionales, ofrecieron su repertorio propio de canciones enmarcadas en un gothic metal con climas melancólicos y oscuros que dan forma a un espectáculo autodenominado Witchcraft Concert. Gozaron de la buena aceptación del público, sobre todo de una buena cantidad de góticos que encuentran a un fiel referente en Häxan. La nueva frontwoman se desenvolvió con naturalidad y gracia durante la interpretación de las piezas musicales sustentadas en gran medida por el aporte de Federico Spinosa en los teclados, además del poder que le aporta el baterista Tato Maltaneri. “Nocturnal”, “Blood in my pillow” y algunas canciones más fueron suficientes para que Häxan dé un paso más de cara a la ambiciosa meta que se han trazado para fin de año: telonear a Nightwish en el Estadio de Obras Sanitarias. Falso Profeta vino a desatar una tormenta de crudo y blasfemo death metal a la “vieja escuela”, sin demasiadas innovaciones pero con la efectividad que el estilo requiere. Deicide, Cannibal Corpse, Possessed e incluso Slayer parecen ser las influencias directas de estos muchachos de Villa Gobernador Gálvez. De éstos últimos hicieron 2 temas: “Seasons in the Abyss” y “Black Magic”, mientras que de su propio material tocaron algunos tracks pertenecientes a su primera edición discográfica “En la casa de Luzbel”: “Orgía”, “Fecal”, “Donde el mal vive”, “Islas Malvinas” y un par de nuevas composiciones en las cuales el bajista Sapo se hizo cargo también de las voces. Lograron sacudir un poco las cabezas de los metaleros que a esta altura querían poguear y hacer headbanging.
A las 3:20, llegó el plato fuerte, donde todos vibramos con la fuerza e intensidad de las obras creadas por los “Embajadores del Tercer Mundo”. Cabra está de regreso en los escenarios rosarinos y calienta motores brindando un imponente tributo a Sepultura. Con un impactante juego de luces, máquina de humo sobre las tablas y dos banderas con el logo de la banda colgadas a ambos costados a modo de telón, luego de la intro de rigor arremetieron con “Arise” y “Dead Embryonic Cells”, desatando el pogo incontenible entre los fans sepultureros y dejando bien en claro que semejante equipamiento y puesta en escena no eran en vano, sino que estaban plenamente sustentados por la entrega de los músicos en vivo. “Refuse/Resist” y “Troops of Doom” no necesitaron demasiada presentación: fueron 2 certeros mazazos al cráneo. Lo mismo pasó con “Slave New World” y “Ratamahatta”. Entre todos estos temas de los brasileños, se hicieron espacio para incluir “Generación Demente”, de su propia autoría, adelantándonos de esta forma que lo suyo no pasa por ser eternamente una “banda tributo”.
Llegando al final del concierto, más clásicos de la banda de Belo Horizonte para mantener la euforia: “Propaganda”, “Territory” y “Roots Bloody Roots”, nada más y nada menos, con berimbau para la intro incluido y uno de los guitarristas tocando en medio del pogo! A pedido del público, hicieron dos bises, en el real sentido de la palabra, ya que tuvieron que repetir “Slave New World” y “Arise”.
La producción integral del espectáculo brindado por Cabra fue muy buena, tanto en lo musical como en lo visual. Cada uno de los 5 miembros cumpliendo con su rol sin problemas, desde el frontman Emanuel hasta el baterista Ariel Cabrera. Un tributo a la altura de la banda homenajeada, enfocado fundamentalmente en la trilogía que conforman las placas “Arise”, “Chaos A.D.” y “Roots”. Si uno se pone exigente, se les podría pedir algo de la primera etapa, de discos como “Morbid Visions” o “Schizofrenia”; pero de todas formas, con todo lo que tocaron tuvimos más que suficiente.
Rosario. Fecha del evento: miércoles 10 de septiembre de 2008. Durante la década del ’80, Nueva York no era una buen lugar para vivir. Mucho menos si uno era inmigrante, negro o latino y vivía en el área conocida como Lower East Side, el barrio bajo de la clase trabajadora de Manhattan, el más peligroso de la isla y uno de los peores del país. En ese contexto de una urbe diezmada por el crimen, las pandillas, la “epidemia del crack” y azotada por una de las peores crisis sociales de su historia, el movimiento hardcore tomó su forma definitiva, generando un “estilo de vida”. Nacía así la escena conocida como New York HardCore (NYHC) y nada volvería a ser igual en el underground: el código violento y contestatario se apoderaba de las calles y aglomeraba a skinheads, punks, thrashers y a cualquier habitante de los ghettos que deseara expresar su furia incontenible. En ese ambiente confluyeron el guitarrista Vinnie Stigma (nacido en Italia) y el vocalista Roger Miret (llegó de niño en balsa desde Cuba) para engendrar Agnostic Front.
Corre el año 2008, el siglo XXI ya se hace sentir con fuerza y, ciertamente, el mundo ya no parece ser un buen lugar para vivir. La crisis del sistema liberal-capitalista se expandió de la mano del proceso de globalización y muchas de las verdades y predicciones distópicas/apocalípticas (como el cambio climático, un mundo sin recursos superpoblado, la amenaza latente de una guerra nuclear, etc.) que reflejaron varios movimientos artísticos populares hace un par de décadas (el metal, el hardcore, el cine, los cómics, etc.) hoy los vemos materializados ante nuestros ojos, sin poder escapar de ellos. Y esas manifestaciones culturales vuelven, ya sea a través de sus iconos fundadores, o con la energía de nuevas generaciones que se identifican con ellos y encuentran en la actualidad un reflejo de aquellos años, con el espíritu de continuar la lucha donde la dejaron. Agnostic Front está en esta ruta, con el reciente disco “Warriors” (2007) como prueba irrefutable de vitalidad y dureza hardcore, reincorporando parte del sonido crossover/thrash que supieron desarrollar en un disco fundamental como “Cause for Alarm” (1986). Una vez contextualizada en esta introducción, me remito a describir lo que fue la histórica presentación de Agnostic Front en Rosario.
Ingresé a El Sótano cuando el grupo telonero, No Kontrol, estaba tocando sus últimos temas. Provenientes de Garín, Gran Buenos Aires, practican un hardcore punk con elementos melódicos y progresivos. Gozaron de buena aceptación por parte de la audiencia que colmó el local de Mitre y Córdoba, retirándose entre aplausos.
A las 23:00 hs. llegó el momento más esperado por los fans del hardcore local. Agnostic Front pisaba fuerte en Rosario. El pogo, el mosh, el headbanging, se apoderaban del recinto con temas de todas las épocas de la banda. El comienzo fue demoledor: “Eliminator”, “New Jack”, “Dead to Me” y “For my Family”, entre otros, fueron una descarga de energía pura propinada por los inoxidables Miret y Stigma, acompañados en la actualidad por Joseph James (guitarra), Mike Gallo (bajo) y Steve Gallo (batería), jóvenes músicos que inyectan sangre joven a la leyenda.
Todavía no había transcurrido la mitad del show cuando el mismo debió suspenderse momentáneamente debido a un apagón en parte del local provocado por un cortocircuito en uno de los equipos. Mientras este desperfecto era solucionado por empleados del lugar, la gente con sus cánticos no dejó que decayera el ambiente, retribuidos por la buena predisposición de la banda, que se quedó en el escenario saludando y esperando el retorno de la energía para seguir haciendo lo que mejor les sale: tocar hardcore en directo.
Una vez solucionados los desperfectos técnicos, Agnostic Front siguió haciendo de las suyas. “You mistake”, “Black and blue”, “Crucified”, “Last warning”, “Blind justice” y “Toxic shock” se sucedieron como certeros golpes de un boxeador con hambre de gloria a su rival. Roger Miret, que en repetidas veces se dirigió a los fans hablando en castellano, desplegó todo su carisma en un himno del hardcore punk como es “Gotta go”, coreado a rabiar, sobre todo por los punks. Finalmente, luego de una hora de intensidad y descarga del más brutal hardcore neoyorquino, Agnostic Front se despidió saludando y agradeciendo a todos los que fueron a compartir ese momento con ellos, quedando solo Vinnie Stigma para entonar una última canción y retirarse con una ovación.
Una vez más quedó demostrada la gran presencia que tiene el movimiento hardcore en nuestra ciudad. Agnostic Front vino a completar de alguna manera la lista de grandes nombres del género que han pasado por Rosario en los últimos años, como Madball, H2O, Terror, The Misfits, Ratos de Porão y podríamos incluir también a los pioneros del grindcore Napalm Death, si bien estas dos últimas guardan una relación más estrecha con el metal. Tal como lo presagiaba el cartel publicitario de este evento, hardcores, punks y thrashers estuvieron presentes para ver de cerca de la leyenda de la vieja escuela del NYHC, unidos en un mismo grito con los puños cerrados en alto.
Rosario. Fecha del evento: Sábado 6 de septiembre de 2008. Con motivo del festejo por cumplir un año en el aire, la gente del programa radial Tiempos Metálicos (que se emite los domingos de 19 a 21 hs. por FM AZ) organizó un festival en El Sótano, el cual congregó a bandas de la escena local así como también a representantes de las provincias de Córdoba y Buenos Aires.
Los muchachos de Suplicio fueron los encargados de abrir el evento. Este trío, formado en la ciudad de Rosario en el año 2005, ofrece en vivo un repertorio de heavy metal con actitud rockera, compuesto por varios covers y algunas composiciones propias. Así fue que interpretaron “1976” y “La Gran 7” (ambas de O’Connor), “Sentir Indiano” (Almafuerte), “Holy Diver” (Dio) y “Atravesando todo límite” (Hermética), además de un par de su autoría. Buena banda, que de a poco empieza a rotar con más frecuencia por el circuito under rosarino.
En segundo orden, Vertebral tocó poco más de media hora, presentando un setlist bastante similar al de su anterior actuación. Ofrecieron con entusiasmo sus propios temas, enmarcados en el heavy/speed/thrash al que ya nos tienen acostumbrados: “Energético”, “Mis terribles amigos del concierto”, “Ruina”. “Tiempo infernal”, “En mis dientes”, etc., a los que otra vez le agregaron el cover de Hermética “Desde el oeste”. Lamentablemente el sonido no los ayudó, algo que sufrieron todas las bandas que tocaron esa noche.
Apenas pasada la medianoche hizo su aparición Víctimas Inocentes De Argentina (también conocidos bajo la siglaV.I.D.A.), quienes llegaban por segunda vez en este año a los escenarios rosarinos, provenientes de la ciudad de Zárate.
Fue la banda que mejor sonó, sin demasiados sobresaltos. Su presencia escénica y la potencia de los temas movilizaron al público que se zambulló en el pogo. Este trío practica un thrash/groove metal fuertemente influenciado por Slayer y Sepultura en su etapa de los ‘90s. Ejecutaron algunas de estas composiciones propias: “Peste”, “Instinto”, “Sometiendo al condenado” (con Adolfo, co-conductor de Tiempos Metálicos, cantando a dúo con el vocalista y bajista Jor), “Sombras de la ignorancia” y “Víctimas del infierno”. También rindieron homenaje a una de sus principales influencias, interpretando “Roots, bloody roots” (Sepultura), muy festejado por la gente. Actualmente V.I.D.A. se encuentra trabajando en lo que será su disco debut; a no perderle el rastro, se trata de una buena propuesta metálica.
Proyekto X venía embalado después de telonear a Rata Blanca. Sin embargo, fueron de los que más sufrieron el mal sonido, ya que por tocar un metal clásico, con muchas melodías de corte ’80, la falta de nitidez les jugó totalmente en contra. Así y todo, pudimos disfrutar de un puñado de buenas canciones como “Sueños de metal”, “No mendigues amor”, “Terapia intensiva” y “Los gatos”. Nuevamente hay que destacar la performance del vocalista Norberto La Petra, quien posee un timbre de voz que recuerda a leyendas como Klaus Meine (Scorpions), Jocke Lundholm (220 Volt) e incluso a Saúl Blanch (ex Rata Blanca), por citar a algunos. Actualmente, Proyekto X continúa grabando su disco en los prestigiosos estudios La Nave de Oseberg, material que seguramente verá la luz en 2009.
Desafiando los problemas sonoros, los muchachos de Redeemer dieron un muy buen concierto. Tocaron temas propios (“Away” fue uno de ellos) e hicieron un par de covers de dos grupos que se encuentran entre sus principales influencias: la épica “Flight of Icarus”, de Iron Maiden, y la poderosa “Forever”, de Kamelot, ambos coreados por los metaleros que quedaban en el local. Si bien la banda suena pareja y ajustada en todos sus componentes, sobresalen tanto el desempeño del frontman Mariano Salaya como el del talentoso guitarrista Marcos Schimne. Reedemer está tocando más seguido y su crecimiento se nota, ojalá puedan coronarlo con algún lanzamiento discográfico en un futuro no muy lejano.
Proveniente de Cruz Alta, provincia de Córdoba, Muzcarian se encargó de cerrar esta primera edición del festival organizado por Tiempos Metálicos. Y más allá de la cantidad de grupos, el deficiente sonido y la poca gente que quedaba pasadas las 3 de la mañana, siempre está bueno ver a una banda que, más allá de influencias recientes, mantienen viva la esencia del heavy metal más tradicional y melódico de los años ’80. Pude percibir eso en Muzcarian (si bien no era la primera vez que los veía en directo), ese algo, ese “fuego sagrado” que hoy es difícil de encontrar con tantos vaivenes de estilos y tendencias. Quizás ellos jamás los escucharon, pero al oír piezas como “Oximoron” y algunas otras de su autoría, era inevitable transportarme a los melódicos y sentidos temas de grupos desconocidos en estas latitudes, como los húngaros Ossian y Pokolgép o los rusos Aria. ¿Era el año 2008 en Rosario? ¿O era 1988 en Budapest o en Moscú? Disculpen el divague, pero el mayor responsable de generar estas sensaciones (y dejar este tramo de la nota librado a la subjetividad) fue el cantante Saimon, dotado del carisma y voz apropiados para este estilo, con mucha actitud e impronta rockera. Además, los covers que hicieron fueron adaptados a su manera de interpretarlos, pudiendo apreciar “Different World” de Iron Maiden junto a “Paradise” y “Speed of Light” de Stratovarius en hirientes versiones en plan traditional heavy metal/speed metal. También se dieron el gusto de incluir un par de power ballad: “18 and Life” de Skid Row y “Wasting Love”, de Iron Maiden que fue muy coreada. Finalizaron su actuación con uno de los mayores clásicos de los británicos: “Fear of the Dark” desató el último pogo de la noche.
Felicitaciones a Tiempos Metálicos por cumplir su primer año apoyando a la escena metalera y por animarse a organizar un festival con bandas under. Si bien han quedan muchas cosas para ser corregidas de cara a un segundo evento, el deseo es que sobre la marcha puedan lograrlo y de esta manera seguir fortaleciendo el movimiento del metal, el objetivo principal de todo esto.
Aquí encontrarán información y opiniones sobre la cultura heavy metal y todo lo que tenga que ver con ella. Además trataré de darle la importancia y el reconocimiento que se merece a la escena rosarina, además de tener en cuenta lo que pasa en el ámbito nacional y global.
