Rosario. Fecha del evento: sábado 23 de febrero de 2008. Debido a la cantidad de bandas que conformaban la grilla, el festival empezó puntual y lamentablemente no pude presenciar la actuación de Sin Piedad. Por los comentarios que recibí, brindaron un show potente y sonaron muy bien, ejecutando temas propios y haciendo el cover de Amon Amarth "The Pursuit of Vikings" con la presencia de Cannibal (vocalista de Carnarium) como invitado especial, cantando a dúo con Adrián Llano. Lo más apropiado hubiese sido que cuenten con un mejor posicionamiento en el cartel del evento, teniendo en cuenta la trayectoria de los ex Crematorio.
Las fotografías de arriba fueron publicadas originalmente en el sitio MySpace de Sin Piedad, en el cual podrán ver más imágenes.
En segundo orden se presentó Cruzada, con su propuesta de heavy/power metal de corte tradicional. Con entusiasmo presentaron un repertorio conformado por canciones propias. Si bien su despliegue fue aceptable, por momentos el sonido del grupo se torna monótono; por ejemplo, la voz principal carece de expresividad en los pasajes más épicos.
Tempestad apostó una vez más al heavy/speed/thrash de corte argentino. A pesar de las ganas que le pusieron, su presentación se vio opacada por el hecho de basar la mayoría de su set en covers, interpretados con cierta desprolijidad: "For Whom the Bell Tolls" (Metallica), "Atravesando todo límite" (Hermética), etc. En mi opinión, confiando un poco más en sus propias composiciones tendrán más chances de progresar.
Antes de los actos principales de la noche, Haxan debutó tocando en vivo ante el público. Su música consiste en un gothic metal triste, con vocalizaciones femeninas. Por ser su primer concierto sonaron bastante bien, prolijos y con un estilo e imagen definidos.
Era el momento del primer "plato fuerte". Carnarium despertaba expectativa en gran parte de los asistentes, y los liderados por Pablo Dello Valle no defraudaron a sus fans. La actual formación de Carnarium se muestra mucho más sólida y poderosa que las anteriores, por lo menos desde que están enmarcados dentro del black/gothic metal (recordemos que durante sus comienzos en la década del ’90, Carnarium practicaba un estilo orientado al death metal y al grindcore). Hoy en día en la banda se destacan las guitarras bien al frente (la dupla Dello Valle/Farfán), la potencia y contundencia aportadas por Gustavo Arambich en batería y el balanceado contraste entre las guturalales vocalizaciones del chileno Cannibal y la suave y sugestiva voz de Keila Lorraine Azaziel.
El setlist estuvo conformado por temas de su disco "Constelaciones de Réquiems", como "El Cristal", y algunas composiciones nuevas que formarán parte de su próximo trabajo discográfico. También hubo lugar para los covers: "Nymphetamine" de Cradle of Filth y "The Philosopher" de Death (incluido en el disco tributo a la legendaria agrupación de Chuck Schuldiner) . Luego de varios aplausos, el público que fue a verlos se retiró en gran medida, sin deseos de ver la impresionante demostración de thrash que se avecinaba. Lamentablemente, se trata de una situación que se está haciendo habitual en la escena local.
Más imágenes de la actuación de Carnarium en www.myspace.com/carnarium
El cierre estuvo a cargo de los esperadísimos Metralla, un verdadero "súper grupo" de thrash metal, que tiene en sus filas al legendario Hugo Benítez (frontman original de Horcas), Jorge Moreno (guitarrista de Serpentor), Jorge Hoyos, Chicho Villagra y Diego Núñez (guitarrista, bajista y baterista de Exthremony, respectivamente). Los músicos comenzaron a tocar y a continuación Hugo Benítez pisó las tablas para ponerle voz a "Muerto en la calle", un clásico del segundo disco de Horcas que desató la euforia de los presentes en el local. El pogo fue casi continuo mientras pasaban los temas de "Fuego en las mentes", disco debut de Metralla que sonó prácticamente en su totalidad, destacándose especialmente "Masacre democrática", "Purgatorio", "Hasta la muerte", "La depuración (de esta sociedad)", etc.
La presencia escénica de Metralla merece un comentario aparte: su apariencia, firmeza y actitud representan una auténtica "postal de thrash metal", sin accesorios "modernosos" ni poses alternativas, sólamente metaleros callejeros revoleando sus pelos; aún antes de que emitieran sonido alguno, no cabían dudas de que delante nuestro teníamos a 5 verdaderos thrashers. Estamos en 2008, pero tranquilamente podía tratarse 1988. Viendo las fotos obtenidas por Victoria Panozzo podrán comprobarlo en detalle.
Pero esta crónica no estaría completa si no resaltara el sonido impecable de la banda en vivo. Benítez mantiene intacta su voz directa y expresiva; Moreno y Hoyos se destacan en los tanto en los riffs como en los solos, mientras que la base rítmica resulta contundente. Metralla suena compacto y poderoso, y eso la gente lo percibe. De más está decir que el público se desató cuando hicieron otros temas de la etapa de Benítez en Horcas junto a Osvaldo Civile: "Violados y devorados" y "Cosas enfermas" sonaron fieles a sus versiones originales de principios de los ‘90s, mientras que el final era casi predecible, con la interpretación de "Solución suicida", una de las mejores canciones del speed/thrash sudamericano que Metralla regrabó en su disco con una estrofa más, que Benítez había descartado al momento de incluirla en "Oíd Mortales el Grito Sangrado". Sin dudas fue un final inmejorable para esta memorable actuación.
Quiero agregar que el de Metralla fue uno de los mejores espectáculos de thrash metal en vivo que me tocó presenciar, al igual que la presentación de Lethal en noviembre del año pasado. Los que gustan de este estilo y del metal en general no deberían perdérselo, realmente vale la pena verlos.
Todas las fotografías (excepto las de Sin Piedad) fueron tomadas por Victoria Panozzo la misma noche del recital en exclusiva para Corcel de Acero.
